El informe de detectives, es la expresión por escrito de las averiguaciones obtenidas y las informaciones realizadas durante el desarrollo de la investigación, por un equipo de investigadores privados para el cliente legitimado. En este informe se presentan toda la información recopilada, las fuentes consultadas, los medios que se han empleado. Los investigadores que han intervenido, las fotografías y videos realizados, documentos aportados, testimonios de testigos y cualquier otra prueba que tengamos.
Los informes de detectives deben ser realizados por profesionales de la investigación privada legalmente habilitados.
El objetivo del informe de un detective privado es comunicar lo que ha visto y escuchado durante la investigación. Los detectives realizamos un relato secuencial sobre las diversas actuaciones relacionadas con el objeto de la investigación, que mas tarde deberá ser ratificado en sede judicial.
En un juicio, el informe se considera un testimonio documentado, objetivo e imparcial. Asimismo, para evitar cualquier duda sobre la veracidad de las pruebas mostradas en el informe, los investigadores nos apoyamos en material multimedia. De esta manera, corroboramos lo que está escrito y evitamos que el informe pueda ser impugnado por la otra parte. Por ejemplo, si decimos que un investigado entró en un bar y mostramos un vídeo que lo demuestra, no habrá duda de la veracidad de la prueba.
Para que el informe sea admitido como prueba testifical debe cumplir ciertas condiciones. Algunas ya las hemos dicho. En primer lugar, debe estar elaborado por un detective habilitado; es decir, que tenga la Tarjeta de Identificación Profesional (TIP) que otorga la dirección General de la Policía.
Si el detective no está habilitado se considera intrusismo laboral y las pruebas no tendrán valor ante el tribunal. Antes de contratarlo puedes pedirle al detective que te muestre el documento que lo acredite para investigar.
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